En las fiestas no te sientes jamás; puede sentarse a tu lado alguien que no te guste (Groucho)
Se me pone cara de tonto cuando escucho en la tele lo de las penas por injurias en la red y las multas pertinentes a que son castigad@s l@s culpables (p.e. asunto del robo de fotos de la nube por hackers). Yo, que vengo sufriendo ese problema desde hace 5 interminables años, me tengo que reír. Ciertas noticias en los 'mass media' me recuerdan un poco a los anuncios, en eso de que debemos creernos "poco" de lo que dicen. Ni te curan el colesterol, ni te quitan las arrugas, ni te adelgazan... ni se persigue a l@s trolls que molestan como moscas cojoneras que son.
En principio, el que recibe los insultos debe de plantear la querella en la localidad donde vive el/la tocapelotas de turno y gastarse los cuartos en un abogado. Después, o el trol reflexiona y lo borra todo y se olvida de tí, o, como me ocurre a mí, se achanta primero unas semanas para después reactivarse sus costados manolomorenos y pacorroscuros y retornar a las andadas. "¡Por favol, necesitorr a la Benetérica!", como diría el gran Chiquito.
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