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“Estos son mis principios. Si no le gustan tengo otros” (Groucho) / Web que honra a un cómico fabuloso, el cual me enseñó a mirar la vida de un modo menos serio (valen2)

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viernes, 1 de mayo de 2020

UNA HISTORIA CURIOSA

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Lo malo del amor es que muchos lo confunden con la gastritis... (Groucho)



La historia es curiosa, pero sencilla de entender. Un poeta se inscribe en una web de poetas. Al día siguiente, otra poetisa, sabedora de que ese poeta lo ha hecho, se inscribe también. El primer poeta, durante 4 semanas, se dedica a subir poemas relacionados con sus sentimientos, sin malmeterse con nadie, recibiendo y ofreciendo comentarios constructivos.

La poetisa comienza su listado poético con una prosa denigratoria contra el primer poeta y, de forma paulatina y maliciosa, le dedica 23 poemillas insultantes y un texto incalificable (ya usados antes en sus redes sociales).
Y no contenta aún, busca comentarios de ese poeta en esa web para poner a continuación frases como "me llama... anafalbestia" (voz de su propia cosecha) o "hipocresía, doble moral... Hay verdaderos expertos".

El poeta, tras informar a la susodicha de su proceder y tras esperar en vano un cambio de actitud, sube a la web un 'epigrama' en quintillas donde habla del caso. ¡Un solo poema! Subido un 30 de abril, tras 26 días de paciencia.
La poetisa, que usa su propio perfil público de la web para auto-inculparse torpemente de lo mismo que denuncia en su panfleto ("al final la rabia, el histerismo, la impotencia, la soberbia le hacen cometer errores"), lo acusa de injuriarla y lo tilda de "troll, mentiroso, manipulador, macarra, obsesivo".

Llegados hasta aquí, alguien puede pensar que ese único poema debió ser tremendamente mordaz o excesivamente cruel para producir tamaño "estallido visceral". Pero el caso es que, leído el epigrama, salvo su título explícito, nada de eso puede colegirse.

En definitiva, mejor lo juzgáis por vosotr@s mism@s. Y seguro que, después, visto lo visto, igual llegáis a la conclusión de que esa poetisa será alguien que no cree, como Shelley o el primer poeta, que "la poesía es un recuerdo de los mejores y más felices momentos de los mejores y más felices ingenios".
Y que, desde luego, tanto su visión de la realidad como su concepto de la manía persecutoria dejan bastante que desear.
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1 comentario:

valen2 dijo...

Y ahora viene el colofón de esta 'historieta': el poeta, antes de borrarse, manda su reprobación sobre el incorrecto proceder de la poetisa, al administrador. Hoy me informa uno de los poetas con quien trabé amistad que me hicieron caso y la poetisa fue expulsada por sus excesos verbales y por poner en evidencia su verdadero carácter. Ahora entiendo que esté tan calladita. ¡El KARMA existe!